miércoles, noviembre 08, 2006

Scoop

Al salir del cine me pregunté como iría el Barcelona en su partido contra el Deportivo. O lo que es lo mismo: la película me dejó indiferente. Y es que en esta ocasión parece que Allen tenía prisa por acabar la película ya que sólo así se entiende que esté dotada de un argumento simplón, ligero, inverosímil y llano, aunque de tanto en cuando consiguiese que las carcajadas y las sonrisas inundaran la sala de cine. Incluso repite con el contraste entre las dos caras antagonistas de la sociedad inglesa que ya vimos en Match Point que acaba de rematar la percepción de una cinta poco trabajada. Es, por tanto, una película menor que sonríe feliz ante el público, conocedera de sus limitaciones.

Aún más: personajes deslucidos y escasamente definidos introducen al espectador en un mar de dudas que no acaba de creerse lo que está viendo porque, entre otras cosas, la trama va dando saltos para avalanzarse estrepitosa e irremediablemente hacia un final bien conocido.

Parece que Woody Allen se vaya desgastando y difuminando en el tiempo dejando muy atrás la meticulosidad, rigurosidad y genialidad de Misterioso asesinato en Manhattan o El Dormilón, entre muchos otros.

- Recomendada: para aquellos que quieren pasar un buen rato.
- No Recomendada: para aquellos que quieren reencontrar al mejor Allen.